domingo, 6 de septiembre de 2009

LA FILOSOFÍA CLÁSICA GRIEGA





Sócrates (469-399 a. de C.)


Nacido de padre escultor y madre comadrona, fue un buen ciudadano de su patria natal, Atenas, a la que sirvió como soldado en varias batallas de la guerra del Peloponeso. Sin embargo, jamás quiso participar en actividades políticas, por impedírselo sus convicciones filosóficas. Al final de su vida se presentó contra él la acusación de no creer en los dioses de la ciudad y corromper a la Juventud; fue considerado culpable y se le condenó a suicidarse bebiendo cicuta. Su discípulo Platón haría más tarde, la apología del sereno comportamiento de Sócrates frente a la muerte.


Los restos conservados de las obras que nos hablan de Sócrates (los diálogos de Platón, Antístenes y Esquines) difieren en muchos aspectos concretos, pero todos ellos están orientados a ensalzar la personalidad del maestro.


El punto de partida de la filosofía socrática es el problema moral, la autoconciencia ("conócete a ti mismo»). Desarrollando esta idea. Sócrates se preocupó fundamentalmente por problemas éticos y procuró investigar conceptualmente la esencia permanente de lo justo, lo bueno, lo bello, etc. Sus investigaciones revisten la forma de preguntas sobre conceptos generales de carácter moral: ¿Qué es la piedad?, ¿qué es el valor?, ¿qué es el autodominio?


Sócrates conoció muy a fondo las obras de los antiguos filósofos de la naturaleza, pero trasladó su interés del universo al ser humano.


El conocimiento, auténtico para Sócrates, no era el saber por el saber, el saber teórico, sino la techne o saber práctico, que tiene una utilidad para el hombre; y enceste sentido la medicina era el saber por excelencia.


Sócrates pretendió fundamentar un conocimiento riguroso, hacer de la filosofía una ciencia. Para ello defendió el método inductivo y condenó el método deductivo de los presocráticos: no hay que partir de afirmaciones sobre la totalidad del mundo, como hacen los primeros filósofos, sino observar empíricamente, experimentalmente, la realidad concreta y. en todo caso, inducir de aquí leyes o principios generales.







Platón (428-347 a. de C.)




Nació en Atenas. Su verdadero nombre era Aristocles; el de Platón, con que ha pasado a la posteridad, era un mote que significaba «ancho de espaldas».


Perteneció a una clase social acomodada, lo que le permitió recibir una educación esmerada en diversas materias: literatura, gimnasia, música- pintura, poesía, etc. Inició sus estudios filosóficos con Cratilo, discípulo de Heráclito y los perfeccionó, a partir de los 20 años. con Sócrates- Fue discípulo de éste y recibió su influencia hasta un punto tal que ha sido difícil decidir cuáles de sus aportaciones filosóficas son originales y cuáles son obra de su maestro.


Tras la muerte de Sócrates. Platón se dedicó a viajar por el mundo conocido: en Egiptoy Cirené entró en contacto con el saber matemático y astronómico de su tiempo: en la Magna Grecia pasó algún tiempo con una secta de pitagóricos, y en sus tres viajes a Sicilia trató de crear un régimen político en el que experimentar sus teorías sobre el Estado, expuestas en su obra La República, pero sin conseguir resultados positivos.


A los 40 años de edad fundó la Academia, primera escuela filosófica organizada en plan pedagógico. Enseñó en ella durante veinte años los más diversos temas: filosofía, matemática, astronomía, zoología, etcétera.


Los años de la Academia fueron los de su madurez creadora y durante ellos escribió sus obras más importantes: una Apología de Sócrates, 34 diálogos y 13 cartas (quizás apócrifas). La obra platónica es una de las primeras obras verdaderamente filosóficas por lo que tiene de saber totalizador y universal, ya que trata de los más diversos aspectos de la cultura: político, ético, físico, astronómico, teológico, etcétera.


Platón sufrió la influencia de cuatro grandes filósofos: de Pitágoras adoptó elementos del orfismo: la tendencia religiosa, la creencia en la inmortalidad del alma humana, el tono sacerdotal: de Parménides aprendió que la auténtica realidad es eterna, inmutable e intemporal, y que el cambio que parecen captar nuestros sentidos corporales no es mas que eso: apariencia, ilusión; de Heráclito extrajo la visión crítica del inmovilismo parmenídeo: el dinamismo heraclíteo afirma que nada es permanente («todo fluye») en el mundo sensible; de Sócrates, la preocupación por problemas éticos y sus ideas políticas aristocráticas y antidemócratas.


Platón expuso su doctrina en forma de diálogos, tal vez porque en su época era preponderante la forma de comunicación oral y porque el diálogo es la forma de escribir que más se asemeja a la de hablar.


Para Platón, el mundo inteligible es el único mundo que se merece verdaderamente el nombre de realidad. pues él es quien proporciona las formas, tas ideas, los modelos, de los cuales el mundo natural no es más que mera copia, reflejos, imitación. Por otra parte, la distinción platónica entre un mundo sensible y un mundo inteligible lleva aparejada la distinción entre conocimiento empírico (sensitivo) y conocimiento intelectivo.


Platón fue el autor de la primera utopía política de la historia de la cultura. Una utopía es la descripción de una imaginaria sociedad perfecta, con un carácter programático (es decir, con la intención de que la sociedad existente se rija, en un plazo mayor o menor de tiempo, por los principios políticos enunciados en la utopía).


La utopía de Platón se encuentra en su obra más conocida: La República. Su planteamiento político es muy original. Se basa en su propia teoría de que la sociedad no será perfecta hasta que los filósofos se hagan reyes o los reyes se conviertan en filósofos. En términos actuales, diríamos que lo que nos propone Platón es una especie de régimen de dictadura de los intelectuales (Política).










Aristóteles (384-322 a. de C.)




Nació en Estagira (región de Tracia). Fue hijo del médico de cabecera del rey Amintas de Macedonia. A los 18 anos entró en la Academia platónica, y en ella permaneció durante dos décadas, hasta la muerte de Platón, por quien siempre sintió una gran admiración. En el año 342 a. de C. fue llamado por el rey Filipo de Macedonia para que se encargara de la educación de su hijo Alejandro Magno. En el año 335 a. de C. regresó a Atenas y fundó su propia escuela: el Liceo (así llamado por estar en la plaza de Apolo Licio), que al principio tuvo características similares a las de la Academia, pero que con los años se convirtió en un círculo de investigación científica y cultural. Los peripatéticos (que así fueron llamados los componentes de la escuela aristotélica) realizaron estudios de diversas materias y acumularon sus conocimientos enciclopédicos en una especie de archivos.


Aristóteles dividió sus escritos en dos grandes familias:


Exotéricos: destinados a la publicidad (la mayoría se han perdido).


Esotéricos o acromáticos: usados como apuntes de clases en el Liceo, fueron publicados casi todos tres siglos después de su muerte.


La primera época de Aristóteles es puramente platónica, tanto en la forma como en el contenido. En su época de transición se enfrentó con algunas de las ideas del maestro, especialmente con su teoría de las ideas, aunque siempre con mucho respeto («Siendo Platón y la verdad igual de amigos míos, siento el imperioso deber de colocar a la verdad por delante»). Y, por fin, ya en su época de madurez, en el Liceo, elaboró sus propias teorías filosóficas.


La obra de este período de esplendor puede dividirse así;


Escritos lógicos: Categorías. Predicamentos, Analíticos, Tópicos, agrupados más tarde bajo el nombre de Organon (o Instrumento).


Escritos metafísicas: ocho libros de la filosofía natural y catorce libros de la filosofía primera o metafísica.


Escritos físicos: Sobre el cielo. Generación y corrupción, Meteorología, Historia de los animales, del alma, De la sensibilidad. De la memoria, del sueño y la vigilia, De la respiración, etcétera.


Escritos ético-políticos: Etica a Nicómaco. Política, Ética a Eudemo, Gran ética, Constitución de Atenas.


Escritos estéticos: Poética, y Retórica.


La lógica, como ciencia formal del saber, nació con Aristóteles. Y con él quedó perfectamente constituida en su forma clásica.


Las ideas lógicas más relevantes de Aristóteles se encuentran en su obra Analíticos. En ella concibe a la lógica como un análisis, y en este sentido la compara con la anatomía.


La lógica


Mientras la ciencia anatómica sería un análisis de los cuerpos, la ciencia lógica sería un análisis del pensamiento o del medio con el que se expresa este pensamiento: el lenguaje. Aristóteles descubrió que el espíritu (el pensamiento, el lenguaje) posee una estructura interna similar a la de la materia. Así, desmenuzó el espíritu humano y extrajo tres elementos fundamentales: el concepto, el juicio, y el raciocinio.


El concepto es la representación intelectual abstracta de un objeto. El hombre conoce las cosas que le rodean de una manera sensible (este monte, esta silla, este hombre), pero tiene una facultad (abstracción) que le permite prescindir de las características concretas y accidentales de los objetos y referirse a sus aspectos esenciales, es decir, le permite saber qué es el monte, la silla, el hombre, etcétera, Estos aspectos esenciales constituyen la idea, el concepto o, en términos aristotélicos, el universal.


Aristóteles clasificó los conceptos en 10 grupos distintos: una sustancia y nueve accidentales (cualidad, cantidad, relación, tiempo, lugar, acción, pasión, estado, posición).


Cuando se unen dos o más conceptos para obtener un enunciado acerca de la realidad, se forma un juicio. Un juicio es verdadero cuando se adecua con la realidad, es decir, cuando los dos conceptos que se unen en el juicio se refieren a dos objetos efectivamente relacionados en la realidad.


El raciocinio es aquella forma lógica que consiste en inferir un juicio desconocido a partir de otros conocidos. Hay dos clases de raciocinios: los deductivos (que a partir de una afirmación universal deducen una afirmación particular).


Y los inductivos (que siguen el camino inverso: van de la recolección de datos particulares a la afirmación de una verdad universal). Para Aristóteles, la forma perfecta de raciocinio es el deductivo, al que llamó silogismo. La teoría de los silogismos (descripción de su forma, de su empleo, de sus leyes, etcétera) constituye el núcleo de la lógica aristotélica.


La metafísica


Aristóteles es también el fundador de una nueva disciplina filosófica: la metafísica.


El objeto fundamental de estudio metafísico es el ser de las cosas. Las distintas ciencias particulares estudian los objetos de este mundo ateniéndose a características específicas de ellos; así, la física estudia


los objetos en cuanto móviles, la química, en cuanto mutables y reorganizables, la biología, en cuanto vivos, etcétera. La metafísica estudiará a los objetos en cuanto existentes y la definió así: «Es la ciencia del ser en cuanto ser». Ahora bien, Aristóteles no dedicó su atención a todos los seres, sino a aquel ser modélico, arquetípico que es Dios, el más perfecto de todos los seres. Así, la Metafísica se convirtió en una especie de teología. Las concepciones éticas de Aristóteles no son muy originales, limitándose a ser la formulación en términos filosóficos de las ideas dominantes sobre el ethos (comportamiento, conducta) en la sociedad de su tiempo.


La política


La obra política de Aristóteles es una de las primeras grandes sistematizaciones de la política de los pueblos. En ella partió de un enorme cúmulo de material empírico (el estudio de las constituciones políticas de la mayoría de las ciudades conocidas de su época). Para él, el Estado es la forma superior de las comunidades humanas. La primera institución natural es la familia (basada en dos tipos de relaciones: marido-mujer, amo-esclavo). La unión de varias familias constituye una aldea y la unión de varias aldeas autónomas y autosuficientes constituye un Estado, una polis. Según Aristóteles el hombre sólo puede realizarse plenamente en el interior de una comunidad política. Lo definió como zoon politíkón, o sea, «animal político».


En cuanto a las formas de gobierno, delineó especulativamente un cuadro de regímenes políticos posibles, considerando tres formas de gobierno aceptables y tres formas condenables:


o Monarquía: Gobierno de uno solo.


o Aristocracia: Gobierno de los mejores


o Democracia: Gobierno de la multitud


Todos estos sistemas deben buscar el bien y la felicidad de todos. Cuando esto no ocurre aparecen perversiones o degeneraciones:


o La Monarquía da lugar a la Tiranía


o La Aristocracia da lugar a la Oligarquía


o La Democracia da lugar a la Demagogia


Aristóteles insinúa que el gobierno ideal puede ser el de una clase intermedia. De cualquier forma, afirma que cualquier forma de gobierno es buena si respeta la felicidad, el bien y utilidad de todos.


Un gobierno que actúe correctamente ha de cumplir:


o Esté de acuerdo con la naturaleza humana.


o Esté de acuerdo con las condiciones históricas concretas que se dan.

Fuente: Enciclopedia Temática Océano.
Melan

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